¿Por qué aprender baile?
En todo el mundo, en todos los países, la danza ocupa un lugar importante. Desde la danza africana, pasando por la danza oriental hasta el haka de los neozelandeses. Las danzas imponen un estilo y a menudo reflejan una situación social o la historia de un país. La inmigración para el tango argentino, la cultura negra americana para el jazz, todos los bailes han sido parte de la historia.
Aprender la danza es, por lo tanto, una forma de entender un país y la historia que fluye de él. Puede ser una forma de integrarse en un país o de conocer a los habitantes de un barrio. Pero hay muchos más beneficios.
Aprender a bailar, sea cual sea el baile, tiene muchos beneficios para el cuerpo y la mente. En pareja, el baile de jazz, el rock, la rumba, las clases de kizomba, todos los bailes requieren un esfuerzo físico para mantenerse en forma. Durante el entrenamiento de baile es esencial calentar y estirar los músculos y se trabaja el ritmo cardiaco con el esfuerzo que hacemos en las clases.
Por último, la flexibilidad es un punto clave para aprender a bailar. Todas sus características hacen de la danza un verdadero deporte. Dar clases aumenta la creatividad porque también es un arte, una forma de expresarse a través del cuerpo y de la música.
Las clases de improvisación o de creación coreográfica requieren imaginación. A medida que las sesiones avanzan, los aprendices de bailarín desarrollan un sentido de la creatividad que puede ser útil en la vida diaria o en el trabajo.
La danza también es una forma de liberar la mente después de un largo día o una larga semana de trabajo. Centrarse en el baile y liberar el cuerpo te permite salir más relajado que cuando empezaste la clase.
Elegir un profesor de baile
Empezar las clases de danza implica elegir al profesor adecuado para que progreses y para ello, entran en juego varios criterios. En primer lugar, el perfil del profesor debe corresponder a las expectativas del alumno y puedes pedirle sus títulos y experiencia. Puede que tenga experiencia como bailarina, profesora o incluso coreógrafa, esto no importa, ya que lo único importante es que le sea útil al alumno.
Algunos profesores tienen más reputación que otros, pero la tarifa es más alta. Al elegir una clase de danza, el profesor es el que debe adaptarse a tus habilidades y a lo que quieres. El precio de una clase de danza debe entrar en las posibilidades de lo que el alumno puede gastar. La forma más efectiva de hacerlo es establecer un rango de precios para ver qué profesores caen dentro de este límite.
Antes de elegir un profesor de danza, hay que filtrar el nivel. No es necesario escoger un profesor con mucha experiencia si solo quieres aprender algunos trucos para bailar por tu cuenta y divertirte. Por otro lado, si quieres realizar una carrera en danza clásica, elegir un bailarín profesional no estará nunca de más.
Para asegurarse que el alumno no abandona a la primera de cambio, el profesor debe llevar a cabo las clases en el sitio que escoja el alumno, ya que tener que estar yendo y viniendo puede desmotivarle mucho. No importa donde sea, puede ser un estudio de danza, lo más importante es que sea cómodo y accesible.
Elegir un profesor también significa elegir un estilo de baile. Clases de baile clásico, clases de zumba, clases de rock, clases de salsa, clases de hip hop, un profesor que sabe bailar los bailes de pareja no sabe automáticamente cómo hacer un salto de catapulta. Para practicar varios bailes y aprender un poco de cada estilo, necesitas encontrar un profesor versátil. Además, sea cual sea el estilo de danza, el profesor debe ser obviamente pedagógico, paciente y atento con sus alumnos.
¿A qué edad se deben dar clases de baile?
Normalmente, nos hacemos esta pregunta cuando vamos a empezar una actividad nueva. Muchos tienen miedo de creer que son muy viejos para poder actuar en centros de baile o en una fiesta. Sin embargo, es importante saber que la danza es accesible a cualquier edad. Solo que los ejercicios no serán los mismos para los niños que para los adultos. Depende del profesor adaptar sus clases. Los niños más pequeños se benefician de las clases de por las mañanas. El objetivo es enseñar a los más jóvenes a que descubran cómo mover el cuerpo.
Los estudiantes aprenden a coordinarse y a utilizar el espacio. Este no es un estilo de baile, sino una introducción al movimiento. Las clases de baile realmente comienzan alrededor de los seis o siete años, cuando están listos para hacer ejercicios de flexibilidad (dentro de lo razonable) y aprender coreografías. Bailes latinos, bailes modernos, bailes contemporáneos, teatro musical, vals, balé, clases de grupo para niños les permiten familiarizarse con todos los estilos de baile para poder elegir más tarde.
No obstante, también se puede empezar a bailar de adulto. Aunque la flexibilidad no es tan importante como lo era a los diez años, los ejercicios permiten volver a estar en forma y mejorar lo más rápido posible. Valses vieneses, capoeira, tango, hip hop, paso doble. Y para los más mayores, las clases se adaptan igual de bien a la forma física del alumno, así que no hay límite de edad para convertirse en el rey del baile.
¿Qué clase de baile elegir?
Cada estilo es particular y no todas las danzas están hechas para todo el mundo. Hay algunos que prefieren los bailes de pareja y otros por su cuenta. Todo depende del carácter de cada uno y de sus gustos musicales. Para elegir una danza, puedes aprovechar una clase de prueba.
Probar un baile es la mejor manera de ver si te gusta. Las fiestas de baile y los bares de baile son también una oportunidad para probar un estilo antes de embarcarse en las clases anuales. Clases de swing, clases de flamenco, clases de bachata, clases de danza oriental, clases de ragga dancehall, clases de salón, el baile es un universo muy amplio que te permite florecer sea cual sea el baile.
Además, será necesario elegir el estilo, por supuesto, que mejor se adaptada a tu estilo de vida y horario. ¿Clases en grupo, clases particulares, cursos intensivos? El taller de baile es una buena manera de mejorar de manera rápida durante las vacaciones. Las clases anuales, por otro lado, te permiten progresar poco a poco, tomándote el tiempo necesario. Cada uno tiene su propia manera de aprender y divertirse.
¿Dónde dar clases de baile?
Hay varias opciones para dar clases de danza. Los conservatorios son los que más reputación tienen y los cursos son estrictos y severos. Para entrar en alguno de ellos, es necesario hacer una prueba de acceso. En función de dónde vivas, puedes encontrar conservatorios regionales, municipales y nacionales.
Muchos de los estudiantes pretenden seguir una carrera profesional como bailarines. Si lo que buscas son clases de baile más tranquilas, las escuelas pueden ser una buena opción también.
Hay escuelas que están acreditadas y otras no. Solamente tienes que preguntar en la escuela para saber si se imparten las clases que quieres. Los centros culturales de danza, música y teatro, así como las asociaciones de danza son también buena opción para empezar a bailar y mejorar.
A menudo se organizan eventos y se crea una comunidad entera de baile. Las clases particulares también te permiten bailar con regularidad en función de tu disponibilidad. Puede que encuentres un profesor a través de los anuncios de Internet o en las tiendas.
Por último, puedes dar clases en una escuela o por tu cuenta gracias a los tutoriales de Youtube, por ejemplo.
¿Cuánto cuestan las clases de baile?
Aprender a bailar como autodidacta obviamente implica poco o ningún costo. Sin embargo, dar clases con un profesor, ya sea en una escuela de baile o en clases particulares, requiere una inversión financiera. Las clases en el conservatorio pueden variar entre 100 y 1000 euros al año.
Esta diferencia puede explicarse por la diferencia entre un conservatorio nacional o regional, pero también porque los honorarios se adaptan a la situación social del alumno. Las clases en las escuelas cuestan alrededor de 600 euros al año, mientras que en las asociaciones cuestan alrededor de 300 euros.
Si eliges clases particulares, la hora costará unos 30 euros. Si se tienen en cuenta diferentes criterios, como la disciplina que se enseña (clases de claqué, clases de baile deportivo, clases de estiramiento, clases de zumba, clases de floor bar, clases de tango argentino, clases de salsa cubana y puertorriqueña, clases de baile hip hop, clases de cha cha, etc.).
La zona geográfica también juega mucho en el precio. ¡Pero hay presupuestos para todos!